Ya que en casa no ponemos belén... que no se diga! Cada día, una misión a cumplir escondida en una casita de cartón. Pasamos un buen rato dibujando casitas y recortando tejados, y después buscando dónde colocarlas... Al final redujimos el rincón musical para dejar sitio a esta pequeña ciudad, podremos sobrevivir con la música apretada unos días!
Otro factor a tener en cuenta era que Lía no alcanzase a desbarajustarlo todo, claro! Pobre criaturilla, todo lo que parece interesante lo ponemos fuera de su alcance ¡qué paciencia tiene que tener! El caso es que estamos muy satisfechos con el resultado ¡pero mucho, mucho!
Me encanta la idea! Perfecto sustituto del belén.
ResponderEliminarlo mejor: la cara de felicidad extrema de tu hijo :D vaya colores bonitos!
Que chula!! Me parece una idea fantástica.
ResponderEliminarYa te digo! Con ese currazo como para dejárselo a la mano...
ResponderEliminarMe apunto esta idea, me encanta, me encanta! Nosotros tampoco ponemos Belén, y esta es una idea para decorar un poco más la casa!
ResponderEliminarA Chus no hace falta que le pellizques los mofletes para salir en las fotos.
ResponderEliminarqué chulooo queda!!!
ResponderEliminarprecioso! que lo disfrutéis!!
ResponderEliminarQue idea más chula!!!!
ResponderEliminarPor favor, ¡qué simpática! Si yo fuera duendecilla fijo que querría vivir ahí :P.
ResponderEliminarJajaja. Qué chulo!
ResponderEliminarMe encanta!!! Y que actividades tenían las casitas!!
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