Mi muñeco de nieve

Yo había pensado en un muñeco de nieve para poner en la espalda del abrigo de Nel, pero él prefirió un dinosaurio. Lógico y natural, por otra parte. La cosa es que yo quedé con la gana de muñeco de nieve, y tarde o temprano tenía que pasar...

Lo planté en mi propio abrigo de pana... que era muy soso... ¡¡ahora me gusta mucho más!! Habrá quien me llame infantil, peeeeeeero ¡me da igual! ¡me gusta mi abrigo nuevo! Hace ocho años que lo tengo, y ahora de repente es nuevoooooo

El muñeco de nieve es de borreguillo, que tengo un montón de una vez que compré un trozo para un chaleco de pastorcillo para Chus. La pieza era anchísima, así que me parece que tengo borreguillo para dos o tres vidas... ¡a menos que se pongan de moda los muñecos de nieve!

La bufanda y el gorro los tejí en un rato muerto, la bufanda es "de verdad", pasa por detrás del cuello y todo, pero el gorro es sólo la mitad que se ve ¡trampa, trampa! Y luego, pues lo normal: ojos de botones, nariz de zanahoria (ejem... zanahoria de fieltro)... lo que viene siendo un muñeco de nieve estándar, vaya!!

Incómodo de coser fue un rato, que el abrigo ya va forrado de borreguillo así que eran dos capas de borreguillo, la de pana, y en la zona del cuello la bufanda de lana... ¡hasta me dolía la mano de guiar aquel montón de material! Fue una suerte tener la máquina de coser de mi madre cuando me puse a coserlo, porque desde luego con la mía habría costado bastante... no hace zigzag ancho tan tupido... y dar dos vueltas esta vez habría sido matador!

Por ahora triunfa en el patio del cole cuando voy a llevar y recoger a los peques ¿será verdad que soy algo infantil? ¿o es que la mayor parte del tiempo los adultos somos demasiado aburridos?