Luego vi las fotos del 241, el bolso de Noodlehead, y la luz se hizo de pronto: bolso 241, 241 días de 2012. Todavía si lo pienso no entiendo por qué lo asocié tan rápido, con lo mal encaminada que iba...
Pero al grano: que la idea es celebrar el día 241 de 2012 haciendo y mostrando al mundo (uy, qué gordo suena dicho así!) un bolso de ese modelo. Y me apunté, claro! ¡con lo que a mí me gustó coser mi primer 241 a salto de mata, inventándome las entretelas!!
Pues este es mi 241 para la ocasión:
Volví a recurrir a las telas de muestrario de tapicería, el mismo muestrario de las riñoneras de los peques... ya dije que quedaba mucho por salir de allí! ¡¡Y tengo más muestrarios sin estrenar!!
Lleva todos los bolsillos que me cupieron excepto los dos exteriores abiertos, que a mí los bolsillos abiertos me sirven para lanzar cosas disparadas cuando hago alguna pericada con el bolso al hombro. Que ya me voy conociendo (sí, voy despacio, pero es que voy conociéndome así, a mano, sin ir al psicólogo ni nada!). Total, que le puse dos bolsillos exteriores con cremallera, uno interior con cremallera y dos superpuestos: uno tamaño barrita mágica de curar golpes, y otro para el boli, que es muy aficionado al excursionismo y nunca aparece cuando tiene algo que escribir.
Y una cinta para sujetar las llaves, pero como suelo usar la anilla del llavero sujeta a la cremallera del monedero, así...
... no me gusta que el llavero esté sujeto a la cinta, para no tener que luchar con él cada vez que tengo que pagar algo. En su lugar innové un poco y metí un imán pequeño -pero potente- dentro de la tela. Las llaves se pegan que da gusto, pero se sueltan con una mano si hace falta.
Para la correa, más de la misma tela, con un tensor metálico que la hace graduable, y varias capas de relleno por dentro, porque como es bastante estrecha tenía miedo a que se quisiera incrustar en el hombro.
Y la abertura principal va cerrada con dos snaps, porque me van tan bien que me da pereza estrenarme con los cierres de imán.
Como la ocasión bien lo merecía, y este bolso es bastante entretenido de hacer, decidí hacer uno más ¿quién dijo miedo? ¡que a saber si el año que viene celebraremos el día 241 o no!
Creo que las telas no necesitan presentación, verdad? Son ellas, las suecas, las mundialmente conocidas y versátiles... y un poco más de tapicería de muestrario en los laterales.
Este lleva bolsillos exteriores abiertos, los bolsillos con cremallera que esta vez son sin cremallera (¡no me quedaban más!)y en una forma un tanto personal. También tiene bolsillos interiores y cinta para las llaves, y la correa graduable.
Y los snaps de la abertura principal son uno de cada color y se ven desde fuera... ¡porque yo lo valgo!
Ahora voy a confesar algo: estoy profundizando en mis artes de vaguería... pero profundizando en serio, eh! Cosí los dos bolsos íntegramente con hilo rojo, porque fue el que me pareció más socorrido para las dos combinaciones y... ¡qué pereza andar cambiando la canilla, no? La verdad es que los cosí los dos a la vez, iba haciendo cada parte de uno y del otro porque me parecía más eficiente, y de esa forma el cambio de hilo habría sido un tostón. Pero vaya, que no hay disculpa que valga, SOY UNA VAGA!! ¡Pero los vagos solemos estar en vanguardia de la evolución, no hay por qué avergonzarse!
Y después de toda esta charla, he de decir que este 241 no es para mí, porque tengo bolsos más que suficientes y luego siempre acabo usando el mismo día tras día, hasta que hay que lavarlo y empiezo a usar otro... Así que esta vez el 241 es para TI ¡¡sí, sí, para ti!! En unos días te lo cuento, y te lo doy. Por ahora vete haciendo cábalas... ¿serás tú? ¿no? ¿quién?
Para ver más versiones del 241, hay una recopilación estupenda aquí
Pues me gustan mucho, el segundo más!!! Esa tela me encanta y aún tengo algo por ahí, jajaj!!
ResponderEliminarLa idea del imán potente es genial!!
Ya veremos qué tal va el imán cuando las llaves se queden atrapadas debajo de media tonelada de cachivaches... pero por ahora estoy contenta con la idea!
EliminarQué bueno lo del imán! :-D Me gustan mucho los dos!
ResponderEliminar... un día si eso ya os cuento lo divertido que es coser alrededor de un imán para dejarlo atrapado en la tela... ¡una experiencia sorprendente!
EliminarEspero que no se para mí...
ResponderEliminarTranqui, que tengo en mente una persona concreta y no-anónima!!
EliminarFantástico me encantan los dos y me encantaría también que uno fuera para mi.
ResponderEliminarEspero que su destinataria opine lo mismo, gracias!!
Eliminarooohhh!!!!!!! Sí, sí, sí!!!!!! Yo quiero!!!! Me vendo barato. Tú sólo dime qué hay que hacer, y ahí estaré yo dispuesta a hacer el chorra todo lo que haga falta para conseguir uno de tus preciados y preciosos bolsos. Pormeto ser tu mejor campaña de marketing por el Sureste español :)
ResponderEliminarJajajajaja, es que eres la caña!! Mira que ya conseguiste que me lo esté pensando... ¡se te da muy bien venderte!
EliminarNada te puede parar! Llevas una racha increíble!
ResponderEliminar¡Ya verás cuando pare! ¡¡No muevo un dedo en dos años!!
EliminarChulísimos los dos
ResponderEliminarcon las prisas sólo había leido media entrada!! te añado el segundo bolso ahora mismo!! me gusta mucho esa tela de ikea, para este bolso y para lo que se tercie!
ResponderEliminarLos dos son preciosos.
ResponderEliminarConfiesalo,no hace falta qué hagas sufrir al personal,la destinataria soy yo!tachannnnnn!hasta me lo he creidp jajaja gracias por adelantado y me encanta Jajajaja
ResponderEliminarJajajaja, otra que se vende bien!! Aaayyysss, mis niñas qué bien saben pedir!!!!!
EliminarMe he enamorado de tu 241 para la ocasión. Enhorabuena.
ResponderEliminarMe encantan los dos!!
ResponderEliminarUn consejo, no metas el móvil dentro del bolso porque con el imán potente te quedarás sin el....
ah! y las tarjetas con banda magnética tampoco....