Yo no tenía ni idea de quién era esta buena mujer, y mucho menos sabía su nombre. Pero un día mi hermana me enseñó una foto preguntando si sería muy complicado copiar el vestido para carnaval, y empecé a meterme en harina...
Había encontrado un tutorial para unos patrones en venta... más de doscientos dólares de patrones!!! Y ahí fue donde yo pensé "bah, con una tela algo elástica, seguro que no es pa tanto". Y le dije que lo haría. Sin patrones. A lo valiente. Yo soy así, y el carnaval me lo exacerba.
En lugar de patrón, le pedí una camiseta suya que le quedase tan ajustada como quería el vestido. Pofesioná como la copa un pino. La camiseta no tenía mangas, pero yo no tenía miedo, así que dibujé lo que faltaba, cerré los ojos, corté la tela, abrí los ojos y vi que mi casa se había llenado de una pelusa brillante roja... una especie de purpurina de hilitos cortísimos. No me importó demasiado, tenía una misión que cumplir!
Le había pedido sus medidas de cadera, del largo del vestido y del largo de la manga. Me inventé directamente la forma de la manga, la cintura, la faldita... El escote, a ojímetro. Y para debajo un culote, este sí, con patrón: la braguita retro de Pandielleando.
Ella me envió la tela y la camiseta-patrón por correo, y yo le llevé el vestido hecho la víspera del carnaval... arriesgando! menos mal que al probarlo le servía! Le pusimos los dorados de las mangas y el broche (o lo que sea, seguro que hasta tiene un nombre) junto al escote, y... ¡¡¡toma ya, qué bien estaba!!!
¿Se nota que me siento muy orgullosa del resultado? ¡es un subidón coser a lo loco y que quede así de bien! Ayyyyy millones de gracias a la modelo por pedírmelo!!
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24/2/15
18/2/15
Carnaval, segunda parte: Invasión vikinga!!!!!!!
Bueno, qué... ¿este año de qué nos disfrazamos en carnaval? ¡¡de vikingos!! La conversación tuvo lugar allá a primeros de enero, apenas salíamos de la navidad... ¡dejar una fiesta y pensar en la siguiente, ese es el ritmo de vida que nos gusta!
Pues nada, vikingos, que siempre viene bien un tema que dé pie a dar gritos y comportarse como bárbaros... sólo por carnaval! Se supone que uno se disfraza de lo que no es, verdad? pues nos disfrazamos de cosas así, a ver si nos vamos convirtiendo en gente civilizada ¿no es de lógica?
En nuestra línea de no comprar disfraces ni complementos, había bastante que hacer: capas de vikingo, cascos con cuernos (que por más que digan ahora que nada de cuernos en los cascos, a nosotros nos gustaban los vikingos de toda la vida ¡con una buena cornamenta!), armamento pesado, escudos... ¡apuf, qué estrés!
Primero fueron las capas. Rectángulos, sin complicarse, ya sabéis cómo enfoco yo el tema disfraces: cero complicaciones, mucha risa. Un snap para abrochar, un cráneo de bicho con cuernos hecho de fimo para tapar el snap (que no hacía falta, ya lo tapaba el pelo de la tela, pero...), y una costura en la zona del cuello para que no nos rasque el borde de la tela. Porque la tela hubo que chamuscarla por el borde antes de que la casa se convirtiera en una gran bola de pelusa marrón, y claro, lo chamuscado muy suave no queda!
Luego venían los cascos, es decir, tomarse la medida de las cabezas, inflar un globo de cada talla, y empezar a pegar papel de periódico con cola blanca. Una capa, otra... un alambre para dar soporte a los cuernos... más periódico y más cola alrededor del alambre... dar forma a esos cuernos, que queden vistosos... más periódico y más cola... y al tendal a secar!
Antes de que secasen del todo nos los pusimos, y los amoldamos a la forma de las cabezas ¡que no, no tenemos cabeza de globo! Cascos a medida, completamente personalizados!
Ya que estábamos en modo periódico y cola, aproveché para preparar las espadas y un hacha. Tubos de cartón (de esos que vienen rodeados de papel de aluminio o film de cocina, es un poco rollo tener que gastar el material de fuera pero al final consigues un tubo de cartón que siempre viene bien), cajas de galletas para las partes planas, y periódico y cola, periódico y cola, periódico y cola... ¡y al tendal!
¡¡Escudos, que nos faltan los escudos!! Bueno, bueno, es que no tenía cartón! Hubo que esperar a que llegara un pedido de cartón, esta vez en forma de caja llena de naranjas ¡qué vida tan dura la de reciclantes! Pues eso, cartón de caja de naranjas, periódico y cola, más periódico y más cola, más periódico y más cola... ¡y al tendal! Ay, no, al tendal no, que estos secaron encima de la mesa...
Pues un par de días más tarde, con toda la cola seca y todo el periódico endurecido, sesión de maquillaje: témpera de colores, un poco de alkyl, brochas y pinceles... ¡¡al ataque!!
Lo último que hicimos fue el cuerno del jefe, para llamar a la tribu. Se nos olvidó hasta la hora de comer del día C (de Carnaval), así que no hubo tiempo de andarse con finuras: papel de periódico, sin cola ni nada, y témpera. Y que aguante lo que pueda!
Y con todo preparado, nos hicimos a la mar en busca de botines fabulosos. Porque ya se sabe, la familia que asalta poblados unida, permanece unida!!
Pues nada, vikingos, que siempre viene bien un tema que dé pie a dar gritos y comportarse como bárbaros... sólo por carnaval! Se supone que uno se disfraza de lo que no es, verdad? pues nos disfrazamos de cosas así, a ver si nos vamos convirtiendo en gente civilizada ¿no es de lógica?
En nuestra línea de no comprar disfraces ni complementos, había bastante que hacer: capas de vikingo, cascos con cuernos (que por más que digan ahora que nada de cuernos en los cascos, a nosotros nos gustaban los vikingos de toda la vida ¡con una buena cornamenta!), armamento pesado, escudos... ¡apuf, qué estrés!
Primero fueron las capas. Rectángulos, sin complicarse, ya sabéis cómo enfoco yo el tema disfraces: cero complicaciones, mucha risa. Un snap para abrochar, un cráneo de bicho con cuernos hecho de fimo para tapar el snap (que no hacía falta, ya lo tapaba el pelo de la tela, pero...), y una costura en la zona del cuello para que no nos rasque el borde de la tela. Porque la tela hubo que chamuscarla por el borde antes de que la casa se convirtiera en una gran bola de pelusa marrón, y claro, lo chamuscado muy suave no queda!
Luego venían los cascos, es decir, tomarse la medida de las cabezas, inflar un globo de cada talla, y empezar a pegar papel de periódico con cola blanca. Una capa, otra... un alambre para dar soporte a los cuernos... más periódico y más cola alrededor del alambre... dar forma a esos cuernos, que queden vistosos... más periódico y más cola... y al tendal a secar!
Antes de que secasen del todo nos los pusimos, y los amoldamos a la forma de las cabezas ¡que no, no tenemos cabeza de globo! Cascos a medida, completamente personalizados!
Ya que estábamos en modo periódico y cola, aproveché para preparar las espadas y un hacha. Tubos de cartón (de esos que vienen rodeados de papel de aluminio o film de cocina, es un poco rollo tener que gastar el material de fuera pero al final consigues un tubo de cartón que siempre viene bien), cajas de galletas para las partes planas, y periódico y cola, periódico y cola, periódico y cola... ¡y al tendal!
¡¡Escudos, que nos faltan los escudos!! Bueno, bueno, es que no tenía cartón! Hubo que esperar a que llegara un pedido de cartón, esta vez en forma de caja llena de naranjas ¡qué vida tan dura la de reciclantes! Pues eso, cartón de caja de naranjas, periódico y cola, más periódico y más cola, más periódico y más cola... ¡y al tendal! Ay, no, al tendal no, que estos secaron encima de la mesa...
Pues un par de días más tarde, con toda la cola seca y todo el periódico endurecido, sesión de maquillaje: témpera de colores, un poco de alkyl, brochas y pinceles... ¡¡al ataque!!
Lo último que hicimos fue el cuerno del jefe, para llamar a la tribu. Se nos olvidó hasta la hora de comer del día C (de Carnaval), así que no hubo tiempo de andarse con finuras: papel de periódico, sin cola ni nada, y témpera. Y que aguante lo que pueda!
Y con todo preparado, nos hicimos a la mar en busca de botines fabulosos. Porque ya se sabe, la familia que asalta poblados unida, permanece unida!!
16/2/15
Carnaval, primera parte: Pequepingüina
Este curso el Entroiro del cole quería dejarnos fríos... ¡¡helados!! La temática giraba en torno a la Antártida, los polos, y el frío en general, y en cuanto lo supe lo tuve claro: para Lía, disfraz de pingüina!! Luego resultó que la clase de Chus se disfrazaba de eso mismo, pero ya os lo enseño otro día... vamos poco a poco!
Busqué en San Google, como procede en estos casos, y di con este disfraz, que me enamoró a primera vista ¡y encima era fácil de hacer! Pues nada, fieltro en mano...
¡¡y pingüinina lista para conquistar la Antártida!!
¿No entra una gana terrible de comer a la pingüina?
Busqué en San Google, como procede en estos casos, y di con este disfraz, que me enamoró a primera vista ¡y encima era fácil de hacer! Pues nada, fieltro en mano...
¡¡y pingüinina lista para conquistar la Antártida!!
¿No entra una gana terrible de comer a la pingüina?
11/3/14
Con retraso, carnaval
Tela marinera nuestra falta de puntualidad con el carnaval de este año... que no fue todo culpa nuestra, eh, pero vamos... Primero en el cole se celebró el carnaval toda una semana antes de la fecha, el día 25 de febrero. Y con un tema general de lo más chulo: Oceanía!!
Los más peques se convirtieron en rapa nuis de la Isla de Pascua ¡menudo trabajo tuvimos para aprender el nombre del disfraz! jajajaja durante un tiempo por aquí se llamaban "arbolígenes" ¡maravillas del chusés!
Lo que más me gustó fue que los disfraces los hicieron ellos mismos, de arriba a abajo, y estaban taaaaan orgullosos!
Los un poco menos peques eran unos animalillos muy majos...
¡anda que no nos llevó rato hacer la cola del koala!
La verdad es que este año yo planeaba pasar de disfrazarme, incluso pasar de disfrazar a Lía, pero me dio cargo de conciencia: tanto Nel como Chus fueron siempre al carnaval del cole (antes de ir al cole) disfrazados de acuerdo con la temática propuesta, y era una de esas cosas que les hacía ir teniéndole cariño al cole ¿cómo iba a no hacer lo mismo con Lía? Entonces fue cuando supe que el tema era Oceanía y lo tuve tan claro... a Lía y a mí no nos quedó más remedio que disfrazarnos de...
Idea y tutorial de Mi rincón de mariposas ¡con lo que a mí me gustó su disfraz de canguro, qué ilusión hacer la réplica!
Una vez celebrado el carnaval escolar, Nel y Chus tenían muy claro que repetían disfraz para el carnaval de la calle (así lo llaman ellos). Pero el martes de carnaval llovía, y no quisieron salir a la calle, así que la celebración se quedó para el sábado siguiente, el 8 de marzo, en Oviedo. Que en Oviedo son así de originales y celebran el carnaval cuando les da la gana! Pues allá nos fuimos el equipo completo:
Nel de indio como hace dos años, y Chus de pirata como el año pasado ¡qué majos ellos, que no me dieron nada de trabajo con sus disfraces!
Lo pasaron pipa, así que... ¡¡viva el carnaval!!
Los más peques se convirtieron en rapa nuis de la Isla de Pascua ¡menudo trabajo tuvimos para aprender el nombre del disfraz! jajajaja durante un tiempo por aquí se llamaban "arbolígenes" ¡maravillas del chusés!
Lo que más me gustó fue que los disfraces los hicieron ellos mismos, de arriba a abajo, y estaban taaaaan orgullosos!
Los un poco menos peques eran unos animalillos muy majos...
¡anda que no nos llevó rato hacer la cola del koala!
La verdad es que este año yo planeaba pasar de disfrazarme, incluso pasar de disfrazar a Lía, pero me dio cargo de conciencia: tanto Nel como Chus fueron siempre al carnaval del cole (antes de ir al cole) disfrazados de acuerdo con la temática propuesta, y era una de esas cosas que les hacía ir teniéndole cariño al cole ¿cómo iba a no hacer lo mismo con Lía? Entonces fue cuando supe que el tema era Oceanía y lo tuve tan claro... a Lía y a mí no nos quedó más remedio que disfrazarnos de...
Idea y tutorial de Mi rincón de mariposas ¡con lo que a mí me gustó su disfraz de canguro, qué ilusión hacer la réplica!
Una vez celebrado el carnaval escolar, Nel y Chus tenían muy claro que repetían disfraz para el carnaval de la calle (así lo llaman ellos). Pero el martes de carnaval llovía, y no quisieron salir a la calle, así que la celebración se quedó para el sábado siguiente, el 8 de marzo, en Oviedo. Que en Oviedo son así de originales y celebran el carnaval cuando les da la gana! Pues allá nos fuimos el equipo completo:
Nel de indio como hace dos años, y Chus de pirata como el año pasado ¡qué majos ellos, que no me dieron nada de trabajo con sus disfraces!
Lo pasaron pipa, así que... ¡¡viva el carnaval!!
16/2/13
Adiós, Antroxu... ¡¡hasta 2014!!
Todo empezó el martes de carnaval de 2012, cuando de vuelta a casa la tribu india decidió que en 2013 serían piratas y surcarían los mares. Pasaron los meses, entre ellos mayo con el cumpleaños pirata de Nel, y la idea no se diluía, así que cuando llegó enero empezaron los preparativos...
Lo primero de todo, los loros. Porque estábamos dispuestos a que nos pillase el toro y no tener disfraz, pero sin loro... ¡eso ni en broma!!
Después vinieron otros detalles chorras, como los pendientes dorados (tuve que forrar unos de plata, el oro y yo no acabamos de entendernos!) y las fundas para botas (idea y tutorial en Mi rincón de mariposas)...

Si, en esencia seguíamos sin disfraz, pero pronto tuvimos pañoleta y sombrero, chalecos de fieltro y parches de ojo... ¡sólo faltaba el armamento! Dicho y hecho
Nos emocionamos tanto con los preparativos, que ya el lunes al desayuno este era el ambiente en nuestra cocina
¡que no se diga que no aprovechan los disfraces!
Y por fin, martes por la tarde. Estos eran mis corsarios (¿bucaneros? ¿filibusteros? ¡¡yo qué sé, digamos piratas!!!)
Y así en equipo salimos de casa...
El tiempo no acompañaba, no, pero nos dio igual. Una camiseta, otra, un polar fino, la camiseta de rayas... ¡listos! Nos juntamos con otros niños y sus madres y merendamos, jugaron, disfrutaron ese rato... ¡era de lo que se trataba!
Después de tantos días (¡meses!) de espera, de tanto celebrarlo en el cole y fuera, el Antroxu-Entroiro-Carnaval pasó y no vuelve hasta 2014. Aquí esperaremos... y ya se oyen rumores de la temática que apetece... Por ahora, es alto secreto!
Lo primero de todo, los loros. Porque estábamos dispuestos a que nos pillase el toro y no tener disfraz, pero sin loro... ¡eso ni en broma!!
Después vinieron otros detalles chorras, como los pendientes dorados (tuve que forrar unos de plata, el oro y yo no acabamos de entendernos!) y las fundas para botas (idea y tutorial en Mi rincón de mariposas)...
Si, en esencia seguíamos sin disfraz, pero pronto tuvimos pañoleta y sombrero, chalecos de fieltro y parches de ojo... ¡sólo faltaba el armamento! Dicho y hecho
Nos emocionamos tanto con los preparativos, que ya el lunes al desayuno este era el ambiente en nuestra cocina
¡que no se diga que no aprovechan los disfraces!
Y por fin, martes por la tarde. Estos eran mis corsarios (¿bucaneros? ¿filibusteros? ¡¡yo qué sé, digamos piratas!!!)
Y así en equipo salimos de casa...
El tiempo no acompañaba, no, pero nos dio igual. Una camiseta, otra, un polar fino, la camiseta de rayas... ¡listos! Nos juntamos con otros niños y sus madres y merendamos, jugaron, disfrutaron ese rato... ¡era de lo que se trataba!
Después de tantos días (¡meses!) de espera, de tanto celebrarlo en el cole y fuera, el Antroxu-Entroiro-Carnaval pasó y no vuelve hasta 2014. Aquí esperaremos... y ya se oyen rumores de la temática que apetece... Por ahora, es alto secreto!
13/2/13
Supermamás
Supermamás somos todas (y quien tenga alguna duda que se pare a pensar medio segundo antes de abrir la bocaza!), algunas más que otras, vale, pero todas las mamás somos súper. Lástima que no siempre nos acordamos, y de vez en cuando necesitamos que llegue alguien y lo diga, como el otro día hizo Yolanda de Pandielleando. Y como después hizo Eva de Flor Roja de Tallo Verde, siguiéndole la estela.
Y entonces llegaron los 1000 comentarios, y decidí hacer un pequeño homenaje a algunas de estas súper mamás, concretamente a las dos ganadoras. Como no tenía mucho tiempo para grandes cosas (seguíamos en vísperas de carnaval, os acordáis? y además tenía que probar el patrón y tutorial de la sudadera Naii, os acordáis? y encima hubo unos días sin lluvia y tenía dos niños ansiosos por andar por la calle... de esto no os acordáis, lo sé, pero yo sí!) pues eso, que como el tiempo escaseaba, opté por unos broches de SuperMami, algo sencillo y rápido, que la cosa era hacerles una gracia. Y tan rápido fue, que no les hice una foto para enseñaros... ¡cabeza!
¿Y quiénes fueron las super mamás elegidas? Pues Dawn y An, por sus comentarios en la entrada "De cocinero" que inauguraron las cuatro cifras en esta cháchara que nos traemos por aquí. Bueno, aparte de los broches les envié unos bichitos para sus peques... ya sabéis... ser supermamá es lo que tiene, que hasta cuando te toca un premio se lo llevan los hijos! Y hoy, por fin, después de pensar que se les había caído el paquete al agua, Dawn recibió el suyo...
Pero aún me quedaban a mí ganas de murga con las supermamás... y decidí hacer mi versión del disfraz para la fiesta de carnaval del cole ¡porque yo lo valgo!
Un antifaz de superhéroe...
el logotipo en el pecho...
y la capa ¡nunca sin mi capa!
Además volví a sacar la peluca de payaso, que lo mismo vale pa un roto que pa un descosido, hice un cinturón rojo con bolsa de superpoderes, y look completo supermamá
Jajajaja qué divertido ver las caras de la gente y desplegar todos mis superpoderes: besos quitapenas, ojos en la nuca, abrazos de oso, mirada fulminante, cosquillas sin contacto (éstas a Chus le chiflan!), menú en dos minutos, siete manos, lectura de mentes, cuentos duermeniños... ¡al final la bolsita de superpoderes llegó a casa casi vacía!!
Y entonces llegaron los 1000 comentarios, y decidí hacer un pequeño homenaje a algunas de estas súper mamás, concretamente a las dos ganadoras. Como no tenía mucho tiempo para grandes cosas (seguíamos en vísperas de carnaval, os acordáis? y además tenía que probar el patrón y tutorial de la sudadera Naii, os acordáis? y encima hubo unos días sin lluvia y tenía dos niños ansiosos por andar por la calle... de esto no os acordáis, lo sé, pero yo sí!) pues eso, que como el tiempo escaseaba, opté por unos broches de SuperMami, algo sencillo y rápido, que la cosa era hacerles una gracia. Y tan rápido fue, que no les hice una foto para enseñaros... ¡cabeza!
¿Y quiénes fueron las super mamás elegidas? Pues Dawn y An, por sus comentarios en la entrada "De cocinero" que inauguraron las cuatro cifras en esta cháchara que nos traemos por aquí. Bueno, aparte de los broches les envié unos bichitos para sus peques... ya sabéis... ser supermamá es lo que tiene, que hasta cuando te toca un premio se lo llevan los hijos! Y hoy, por fin, después de pensar que se les había caído el paquete al agua, Dawn recibió el suyo...
Pero aún me quedaban a mí ganas de murga con las supermamás... y decidí hacer mi versión del disfraz para la fiesta de carnaval del cole ¡porque yo lo valgo!
Un antifaz de superhéroe...
el logotipo en el pecho...
y la capa ¡nunca sin mi capa!
Además volví a sacar la peluca de payaso, que lo mismo vale pa un roto que pa un descosido, hice un cinturón rojo con bolsa de superpoderes, y look completo supermamá
Jajajaja qué divertido ver las caras de la gente y desplegar todos mis superpoderes: besos quitapenas, ojos en la nuca, abrazos de oso, mirada fulminante, cosquillas sin contacto (éstas a Chus le chiflan!), menú en dos minutos, siete manos, lectura de mentes, cuentos duermeniños... ¡al final la bolsita de superpoderes llegó a casa casi vacía!!
9/2/13
El chaleco
Ya os comenté que este año el carnaval familiar va de piratas, y creo que también en algún momento dejé claro que me gusta complicarme muy poco la vida con los disfraces, más bien abusar de los complementos hasta que quede claro quiénes somos. Pues para esta vez, eran imprescindibles los chalecos: con un buen chaleco algo raído, cualquier camiseta de rayas parece de pirata!!
Y aunque supongo que todo el mundo lo conoce, yo por si acaso voy a compartir mi método tonto para hacer el chaleco más rápido y veloz de este lado de la mar océana. Con telas de carnaval, es decir sin dobladillos ni remates, hasta sin máquina de coser se hace en un periquete, que al final no llegará a 20 cm de costura! Y sirve para distintos formatos de chaleco y todo... ¡una ganga, oiga!
La cosa es más o menos así:
* Se corta un rectángulo de tela con las medidas contorno del cuerpo x largo del chaleco (si queremos que cruce delante, le añadimos al "contorno del cuerpo" la medida que se tiene que cruzar)
* Doblamos el rectángulo dejando el revés hacia fuera y el delantero tan superpuesto como queremos que quede, y cortamos en los dobleces las aberturas para los brazos. Que quepa el brazo con toda la ropa que vaya debajo del chaleco! Damos dos cortes a la zona delantera, para dar forma al cuello, teniendo en cuenta la bajada que queramos
* Cosemos los dos hombros...
* Damos la vuelta... ¡y ya está!
No se me quejará nadie de dificultad... Así, sin rematar nada ni hacer dobladillos ni complicarse la vida, sirve con telas típicas de disfraz: borreguillo, forro, fieltro, foam... Los nuestros de pirata sólo llevan el trabajo extra de cortar todo alrededor irregular, como si estuviera hecho un asquito de muchos años de uso surcando los mares
Y aunque supongo que todo el mundo lo conoce, yo por si acaso voy a compartir mi método tonto para hacer el chaleco más rápido y veloz de este lado de la mar océana. Con telas de carnaval, es decir sin dobladillos ni remates, hasta sin máquina de coser se hace en un periquete, que al final no llegará a 20 cm de costura! Y sirve para distintos formatos de chaleco y todo... ¡una ganga, oiga!
La cosa es más o menos así:
* Se corta un rectángulo de tela con las medidas contorno del cuerpo x largo del chaleco (si queremos que cruce delante, le añadimos al "contorno del cuerpo" la medida que se tiene que cruzar)
* Doblamos el rectángulo dejando el revés hacia fuera y el delantero tan superpuesto como queremos que quede, y cortamos en los dobleces las aberturas para los brazos. Que quepa el brazo con toda la ropa que vaya debajo del chaleco! Damos dos cortes a la zona delantera, para dar forma al cuello, teniendo en cuenta la bajada que queramos
* Cosemos los dos hombros...
* Damos la vuelta... ¡y ya está!
No se me quejará nadie de dificultad... Así, sin rematar nada ni hacer dobladillos ni complicarse la vida, sirve con telas típicas de disfraz: borreguillo, forro, fieltro, foam... Los nuestros de pirata sólo llevan el trabajo extra de cortar todo alrededor irregular, como si estuviera hecho un asquito de muchos años de uso surcando los mares
7/2/13
Entroiro en el cole
Pues eso, que en el cole estuvimos de fiesta... de disfraces!!
Cada clase un país, para ir abriendo boca para la semana de la Fiesta de las Lenguas... Mirad, mirad...
Los pequeñinos, de chinitos de la China, con su dragón y todo, para comerlos!!!
La clase de primer ciclo de franceses... cocineros franceses, con su receta estrella en la bandeja
De ahí en adelante, tuvimos la representación española (curioso, estando ya en España, no?) con flamencas, toreros y corredores de sanfermines
También vinieron a vernos algunos indios (de la India) con sus colonizadores británicos... ¡pero no tengo foto! Imperdonable... ¡si hasta estaba Gandhi!!!!
Y gracias a la máquina del tiempo instalada en el ascensor del cole, llegaron unos representantes de los faraones ¡¡increíble!!
Y además, piratas, trogloditas, y un poco de todo ¡¡fue un día estupendo!!
Una vez más... GRACIAS a todos esos profes que trabajaron y trabajaron y trabajaron para regalarnos una tarde tan especial ¡¡sois los mejores!!
Cada clase un país, para ir abriendo boca para la semana de la Fiesta de las Lenguas... Mirad, mirad...
Los pequeñinos, de chinitos de la China, con su dragón y todo, para comerlos!!!
La clase de primer ciclo de franceses... cocineros franceses, con su receta estrella en la bandeja
De ahí en adelante, tuvimos la representación española (curioso, estando ya en España, no?) con flamencas, toreros y corredores de sanfermines
También vinieron a vernos algunos indios (de la India) con sus colonizadores británicos... ¡pero no tengo foto! Imperdonable... ¡si hasta estaba Gandhi!!!!
Y gracias a la máquina del tiempo instalada en el ascensor del cole, llegaron unos representantes de los faraones ¡¡increíble!!
Y además, piratas, trogloditas, y un poco de todo ¡¡fue un día estupendo!!
Una vez más... GRACIAS a todos esos profes que trabajaron y trabajaron y trabajaron para regalarnos una tarde tan especial ¡¡sois los mejores!!
2/2/13
De cocinero
No me gusta llamarlo disfraz, porque es mucho más que un disfraz: es parte del juego cuando se acercan a su cocinita, es algo práctico para ayudar en la cocina de verdad sin ensuciarse, y es... sí, un disfraz, claro. ¡El disfraz de Nel este año en el cole!
Desde que Chus recibió el suyo de parte de la nena de Dawn (una vez más... ¡gracias, Pantigana, por organizar ese Amigo Invisible, y gracias Dawn por tus regalazos!), Nel me recordaba de vez en cuando que le debía uno. Y un buen día, la profe nos cuenta que en la fiesta escolar de carnaval la temática será "países del mundo", y en clase de Nel irán de franceses, de cocineros franceses para más señas. Así que... ¡a buscar tela! (vamos a dejar de lado el tema topicazo de que los franceses sean cocineros, con lo bien que se come por estos lares...)
En principio nos lo pedían blanco, pero para casa nos gustaba más colorido, así que lo hicimos reversible:
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Seguí el patrón del conjunto de Chus, aunque lo aumenté algo: el gorro de Chus a Nel no le entra, y aunque el mandil sí que le sirve... ¡prefiero hacérselo crecedero y que le dure! El gorro se hace muy fácilmente con el tutorial de Mi Rincón de Mariposas, aunque para hacerlo reversible la parte de encajar las piezas para coser se hace un poco más pesada. Nada que no resuelva una dosis doble de paciencia materna, y unos minutos de calma con la boca llena de alfileres.
Creo que estamparemos juntos el lado blanco un día que nos aburramos, porque así sigue pareciéndonos bastante soso ¿o no?
Ahora sólo le falta ponérselo para prepararnos la cena un día de estos...
Desde que Chus recibió el suyo de parte de la nena de Dawn (una vez más... ¡gracias, Pantigana, por organizar ese Amigo Invisible, y gracias Dawn por tus regalazos!), Nel me recordaba de vez en cuando que le debía uno. Y un buen día, la profe nos cuenta que en la fiesta escolar de carnaval la temática será "países del mundo", y en clase de Nel irán de franceses, de cocineros franceses para más señas. Así que... ¡a buscar tela! (vamos a dejar de lado el tema topicazo de que los franceses sean cocineros, con lo bien que se come por estos lares...)
En principio nos lo pedían blanco, pero para casa nos gustaba más colorido, así que lo hicimos reversible:
¡en vivo, sin flash, no transparenta tanto! |
Seguí el patrón del conjunto de Chus, aunque lo aumenté algo: el gorro de Chus a Nel no le entra, y aunque el mandil sí que le sirve... ¡prefiero hacérselo crecedero y que le dure! El gorro se hace muy fácilmente con el tutorial de Mi Rincón de Mariposas, aunque para hacerlo reversible la parte de encajar las piezas para coser se hace un poco más pesada. Nada que no resuelva una dosis doble de paciencia materna, y unos minutos de calma con la boca llena de alfileres.
Creo que estamparemos juntos el lado blanco un día que nos aburramos, porque así sigue pareciéndonos bastante soso ¿o no?
Ahora sólo le falta ponérselo para prepararnos la cena un día de estos...
30/1/13
Los chinitos de la China
Tenía yo seis años cuando me tocó conocer un cole "grande", de esos con más de una clase, con patio y todo ¡hasta comedor tenía! Y con un montón de niños todos de la misma edad en clase... era todo rarísimo, la verdad, pero como tenía seis años me acostumbré pronto, y en seguida me parecía de lo más normal un cole con tantos pasillos y tantas puertas en cada pasillo, y tal cantidad de niños y maestros que era imposible saber el nombre de todos. Mi clase se llamaba 1ºA... ¡hasta entonces mis clases se habían llamado "escuela de aquí" "escuela de allá"!
Curiosamente ahora a mis hijos, en su colegio enorme de largos pasillos llenos de puertas, vuelve a sonarles muy exótica la idea de un cole con una clase para primero... ¡ya lo de 1ºA ni lo conciben! Supongo que ellos también se acostumbrarían rápidamente a ver en el patio niños que no saben cómo se llaman... aunque espero que no tengan que hacerlo, la verdad!
Pues en aquel cole tan grande, aquel curso, los niños de primero A nos disfrazamos de chinos. Ni el más remoto recuerdo de los disfraces del resto de clases, pero recuerdo perfectamente el recitado de nuestra actuación estelar
Muy listos no parecían estos chinos, no, allí bajo el chapalón de piedlas... ¡pero vaya si aprendí la rima, que pasaron veintitantos años y ahí sigue, archivada en mi memoria, inalterable!
Y hete aquí que este curso, en este cole tan diferente, le toca a Chus disfrazarse de chinito con los niños de su clase...
... no me diréis que no suena apasionante...
Curiosamente ahora a mis hijos, en su colegio enorme de largos pasillos llenos de puertas, vuelve a sonarles muy exótica la idea de un cole con una clase para primero... ¡ya lo de 1ºA ni lo conciben! Supongo que ellos también se acostumbrarían rápidamente a ver en el patio niños que no saben cómo se llaman... aunque espero que no tengan que hacerlo, la verdad!
Pues en aquel cole tan grande, aquel curso, los niños de primero A nos disfrazamos de chinos. Ni el más remoto recuerdo de los disfraces del resto de clases, pero recuerdo perfectamente el recitado de nuestra actuación estelar
Los chinitos de la China
cuando no tienen qué hacel
tilan piedlas a lo alto
y dicen que va a llovel
Muy listos no parecían estos chinos, no, allí bajo el chapalón de piedlas... ¡pero vaya si aprendí la rima, que pasaron veintitantos años y ahí sigue, archivada en mi memoria, inalterable!
Y hete aquí que este curso, en este cole tan diferente, le toca a Chus disfrazarse de chinito con los niños de su clase...
"y vamos a tener un sombrero con una coleta, y nos vamos a meter en la cola de un dragón"
... no me diréis que no suena apasionante...
¿¿Lo recordarán dentro de veinte años??
(si lo recuerdan, aunque olviden la capital de Angola o la tabla del 7, ya habrá merecido la pena que su colegio exista hoy)
29/1/13
Un pequeño avance
de los preparativos para el carnaval:
El año pasado, el día de carnaval, salimos de casa haciendo el indio, y sobre la marcha decidimos el disfraz para este año. ¡Ahí es nada, con un año de antelación! Y como somos gente formal, mantuvimos las intenciones todos estos meses.
Ahora que se acerca el carnaval, poco a poco van apareciendo en casa piezas de nuestros próximos disfraces... Serán disfraces hechos básicamente de complementos, y la ropa de calle que mejor nos encaje, sin complicaciones. ¡Los complementos siempre son lo mejor de los disfraces!
El año pasado, el día de carnaval, salimos de casa haciendo el indio, y sobre la marcha decidimos el disfraz para este año. ¡Ahí es nada, con un año de antelación! Y como somos gente formal, mantuvimos las intenciones todos estos meses.
Ahora que se acerca el carnaval, poco a poco van apareciendo en casa piezas de nuestros próximos disfraces... Serán disfraces hechos básicamente de complementos, y la ropa de calle que mejor nos encaje, sin complicaciones. ¡Los complementos siempre son lo mejor de los disfraces!
15/1/13
Vienen los bomberos!!
Vamos terminando con la sesión de disfraces de estos días... Desde el segundo año de cole de Nel, cada carnaval son dos disfraces diferentes: el del cole, y el del día de carnaval en sí. Los del cole (excepto el año de los payasos, que cada niño iba a su manera) los hacíamos en el cole todos juntos, en plan bolsas de plástico y papel y esas cosas. El curso pasado la temática era el bosque, y a los peques de infantil les tocaba ir de trasgos y xanas. Yo no sabía de qué disfrazar a Chus, porque los disfraces de plástico le daban bastante mal rollo y no quería ni acercarse... hasta que la mamá de otro niño que tampoco iba todavía al cole me propuso hacerles a los dos el disfraz de bombero, como los "niños grandes" de tercer ciclo... ¡qué buena idea!
Un pantalón y una cazadora azul marino (teníamos las dos cosas, por suerte), un casco de bici, y dos botellas de plástico grandes pegadas a un trozo de cartón. Unas tiras de plástico rojo para poner en la ropa (con imperdibles por el lado de dentro, cero complicaciones), papel de aluminio para forrar el casco y la hebilla de cartón, témpera roja para pintar las botellas... y...

¡¡Tachánnnn!!
La "manguera" del extintor era un montón de papel de periódico, enrollado sobre sí mismo para apretarlo, envuelto en papel pinocho y rematado con un rollo de papel de cocina forrado de papel de aluminio. Imprimimos unos logotipos de "Bomberos de Asturias" para dar el toque de gracia, y tan campantes!
Un pantalón y una cazadora azul marino (teníamos las dos cosas, por suerte), un casco de bici, y dos botellas de plástico grandes pegadas a un trozo de cartón. Unas tiras de plástico rojo para poner en la ropa (con imperdibles por el lado de dentro, cero complicaciones), papel de aluminio para forrar el casco y la hebilla de cartón, témpera roja para pintar las botellas... y...

¡¡Tachánnnn!!
La "manguera" del extintor era un montón de papel de periódico, enrollado sobre sí mismo para apretarlo, envuelto en papel pinocho y rematado con un rollo de papel de cocina forrado de papel de aluminio. Imprimimos unos logotipos de "Bomberos de Asturias" para dar el toque de gracia, y tan campantes!
11/1/13
Somos los indios bravos
El año pasado teníamos requeteclaro que nos íbamos a disfrazar de indios. Y yo tenía requeteclaro que no iba a comprar los disfraces, pero tampoco a trabajar mucho en ellos. Así que compré arpillera, la sacudí, la lavé, la tuve tendida fuera un par de días para que perdiera el polvillo ese que suelta, y aún así sigue soltando un montón, casi un año después...
Corté las piezas para los tres, rectángulos con abertura para la cabeza, más otros rectángulos a modo de polainas. No las rematé, sólo saqué hilos (¿o más bien cuerdas?) para dejar flecos. El disfraz perfecto, porque según el frío que haga ahí debajo se puede poner toda la ropa que queramos.
Luego corté tiras y picos y lo que se me ocurrió en fieltro de colores, y lo pegué a golpe de cola térmica. Unas hebras de las que había sacado se atan a la cintura, las polainas las pegué a sí mismas con cola térmica (sí, es cutre, pero rápido, y al terminar se despega de un tirón, y listo para guardar) y ¡ya está!
Y claro, los complementos, que no pueden faltar:
Para las bandas de la cabeza, pintamos un folio con rotuladores, haciendo picos irregulares, y cortamos las tiras. Las plastifiqué y les pegué las plumas por el lado de dentro con un trozo de celo.
Las plumas las recorté con tijeras de picos, les pegué un palo de brocheta por detrás para que quedaran tiesas, y corté los "flecos" desde los picos del borde hasta el palo. Usé folios de colores, aunque podrían haber sido de papel publicitario, supongo.
Mi peluca son casi dos ovillos de lana negra, la enrollé alrededor del respaldo de dos sillas hasta tener una franja de unos 40 cm. Luego cosí a cadeneta sujetando todas las hebras, quedó una raya del pelo muy mona ;). Corté justo frente a la cadeneta y até con gomas las supertrenzas. Iba a trenzarlas, eh, pero era demasiado gordo y no quedaba bien. Abriga un montón!!
El hacha tiene el mango hecho con varios palos juntos, forrados con una tira larga de fieltro, y la hoja con varias capas de cartón pintado con témpera. Van pegados uno a otro con cola térmica, y luego atado con una cuerda que adorna más que sujetar.
Arco y flechas: unos palos delgados, un trozo de cuerda, y recortes de fieltro de colores.
Y el caballo, Sinforoso Corazón (nombre curioso, lo sé...), fue en su vida anterior un calcetín mío. No di ni una puntada: lo rellené de fibra de almohada, lo até y lo pegué con celo a un palo de escoba, le pegué lengua, ojos y orejas de fieltro con cola térmica, hice las crines con un cordel y las pegué, y la correa por debajo del hocico (que aún no estaba en estas fotos) también va pegada. Galopa como el viento...

¡¡Lo pasamos como los indios!!
¡¡Ah, y la pintura de la cara!! Sólo tenía rojo y negro de esas barras de maquillaje de carnaval... así que improvisé: cara bien entafarrada de hidratante, y ceras manley de las de pintar. Así conseguimos el azul y el verde... Se quitan igual que las de maquillaje, con toallitas. Y tenemos un montón de colores!
Corté las piezas para los tres, rectángulos con abertura para la cabeza, más otros rectángulos a modo de polainas. No las rematé, sólo saqué hilos (¿o más bien cuerdas?) para dejar flecos. El disfraz perfecto, porque según el frío que haga ahí debajo se puede poner toda la ropa que queramos.
Luego corté tiras y picos y lo que se me ocurrió en fieltro de colores, y lo pegué a golpe de cola térmica. Unas hebras de las que había sacado se atan a la cintura, las polainas las pegué a sí mismas con cola térmica (sí, es cutre, pero rápido, y al terminar se despega de un tirón, y listo para guardar) y ¡ya está!
Y claro, los complementos, que no pueden faltar:
Para las bandas de la cabeza, pintamos un folio con rotuladores, haciendo picos irregulares, y cortamos las tiras. Las plastifiqué y les pegué las plumas por el lado de dentro con un trozo de celo.
Las plumas las recorté con tijeras de picos, les pegué un palo de brocheta por detrás para que quedaran tiesas, y corté los "flecos" desde los picos del borde hasta el palo. Usé folios de colores, aunque podrían haber sido de papel publicitario, supongo.
Mi peluca son casi dos ovillos de lana negra, la enrollé alrededor del respaldo de dos sillas hasta tener una franja de unos 40 cm. Luego cosí a cadeneta sujetando todas las hebras, quedó una raya del pelo muy mona ;). Corté justo frente a la cadeneta y até con gomas las supertrenzas. Iba a trenzarlas, eh, pero era demasiado gordo y no quedaba bien. Abriga un montón!!
El hacha tiene el mango hecho con varios palos juntos, forrados con una tira larga de fieltro, y la hoja con varias capas de cartón pintado con témpera. Van pegados uno a otro con cola térmica, y luego atado con una cuerda que adorna más que sujetar.
Arco y flechas: unos palos delgados, un trozo de cuerda, y recortes de fieltro de colores.
Y el caballo, Sinforoso Corazón (nombre curioso, lo sé...), fue en su vida anterior un calcetín mío. No di ni una puntada: lo rellené de fibra de almohada, lo até y lo pegué con celo a un palo de escoba, le pegué lengua, ojos y orejas de fieltro con cola térmica, hice las crines con un cordel y las pegué, y la correa por debajo del hocico (que aún no estaba en estas fotos) también va pegada. Galopa como el viento...
¡¡Lo pasamos como los indios!!
¡¡Ah, y la pintura de la cara!! Sólo tenía rojo y negro de esas barras de maquillaje de carnaval... así que improvisé: cara bien entafarrada de hidratante, y ceras manley de las de pintar. Así conseguimos el azul y el verde... Se quitan igual que las de maquillaje, con toallitas. Y tenemos un montón de colores!
Somos los indios bravos
de la tribu del pinzón
venimos en son de guerra
para dar una función
ortan chíribi
ortan chíribi
mahuachi fumahuachi
fumahuachi maruma jauja
mahuachi fumahuachi
fumahuachi maruma jao jao jao jao
Yo como soy más bravo
me pongo el mejor traje,
en toda la tribu no hay
otro indio más salvaje
ortan chíribi
ortan chíribi
mahuachi fumahuachi
fumahuachi maruma jauja
mahuachi fumahuachi
fumahuachi maruma jao jao jao jao
(cosas de haber pasado media infancia haciendo el indio)
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