Pequeña pausa en la vuelta al cole para dar un repaso a las posibilidades de las piedras del río. Sí, aquí vuelvo a estar con piedras del río, convertidas en pesos para los patrones. Hace como mil años os enseñé las que pinté para mí, pues hoy os enseño las que ganchillé para una amiga a la que le debía un regalo.
- ¿Enviar piedras por correo? ¿estás mal de la cabeza?- Pues sí, envié piedras por correo, y sí, probablemente esté mal de la cabeza ¿qué pasa? El primer paso es reconocerlo!
El caso es que en mi búsqueda de pesos para calcar y cortar patrones había visto la idea de ganchillear colorines alrededor de una piedra, y fue de esas ideas que tienes que probar sí o sí. A ver, no voy a decir que sea lo más cómodo de esta vida darle al ganchillo alrededor de un canto del río, pero sólo hace falta sujetar la piedra para el último trozo, y... ¡merece la pena! Porque es un gustazo ver cómo lo ganchillado se adapta a la forma del pedrusco y lo rodea. Me encantó la experiencia!!
Ahora espero que a ella le sean útiles estos morrillos. Nunca había regalado piedras así, por la cara... sin ser semipreciosas ni talladas ni na... jajajajaja
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23/9/15
6/4/15
A cuatro manos
Hay veces que tener dos manos está bien, pero se trabaja mejor a cuatro. Y de paso, se consigue que el resultado final sea único... irrepetible!
Porque ya va haciendo falta pensar en verano, en sol, en días de prao y río... La abuela tejió la parte de arriba del vestido, yo cosí la de abajo, entre las dos elegimos botones del botín de la herencia...
Hice bies con la misma tela para las sisas y el cuello, vestido de verano listo!
Para otra vez, con más tela en la parte de abajo, que queda un poco raro... ¡siempre se aprende algo!
Y luego la experta tejedora se ocupó de una rebeca a juego... ¡equipo completo! Si es que a cuatro manos da gusto trabajar!
¡¡Y si hacen falta seis, seguro que aparecen otras dos!!
Porque ya va haciendo falta pensar en verano, en sol, en días de prao y río... La abuela tejió la parte de arriba del vestido, yo cosí la de abajo, entre las dos elegimos botones del botín de la herencia...
Hice bies con la misma tela para las sisas y el cuello, vestido de verano listo!
Para otra vez, con más tela en la parte de abajo, que queda un poco raro... ¡siempre se aprende algo!
Y luego la experta tejedora se ocupó de una rebeca a juego... ¡equipo completo! Si es que a cuatro manos da gusto trabajar!
¡¡Y si hacen falta seis, seguro que aparecen otras dos!!
12/2/15
¡Días fríos a mí!
Ya sabéis de sobra cómo va esto, te haces con unos telares circulares y de pronto todo lo que te apetece hacer es darle vueltas a la hebra alrededor del cacharro ese... Así que cogí el telar más pequeño y empecé a enroscar lana... Tuve que contar las vueltas, que no es que sea algo que me apasione, pero quería hacerme dos calentadores y me apetecía que fueran igual de largos ¡tiquismiquis que es una a veces!
La verdad es que se hacen muy rápido, es entretenido y fácil, requetefácil. La única pega es que ¡se me caen pierna abajo! jajajaja supongo que tendré que pasarles un elástico o algo, porque me gustan y los quiero usar!
... Si ya sabía yo que lo de los calentadores iba a ser un RUMS reincidente...
Pues fue terminar los calentadores y apetecerme enredar con otro de los telares... qué hago, qué no hago... en principio iba a ser un cuello, pero luego poco a poco me fui imaginando algo más raro... y así acabamos!
Pinta rara sí que tiene, eh!! jajajaja es cuello y gorro, todo junto. Así el cogote no se desabriga nunca!
Siempre es divertido experimentar...
La verdad es que se hacen muy rápido, es entretenido y fácil, requetefácil. La única pega es que ¡se me caen pierna abajo! jajajaja supongo que tendré que pasarles un elástico o algo, porque me gustan y los quiero usar!
... Si ya sabía yo que lo de los calentadores iba a ser un RUMS reincidente...
Pues fue terminar los calentadores y apetecerme enredar con otro de los telares... qué hago, qué no hago... en principio iba a ser un cuello, pero luego poco a poco me fui imaginando algo más raro... y así acabamos!
Pinta rara sí que tiene, eh!! jajajaja es cuello y gorro, todo junto. Así el cogote no se desabriga nunca!
Siempre es divertido experimentar...
5/2/15
Mariposas en la cabeza
De vez en cuando me apetece hacer algo muy pequeño, de cinco minutos y que me sobren dos, algo que me parta la secuencia mental que tenga en ese momento (no voy a contar el tipo de secuencia mental que me gusta cortar por lo sano, todos tenemos alguna de vez en cuando!). Muchas veces el ganchillo es mi mejor aliado en momentos así, y esta vez -sin que sirva de precedente- cogí un ganchillo bastante fino, e hilo de bordar. Y tejí unas mariposas diminutas, sin saber para qué me iban a servir ni qué podría hacer con ellas una vez hechas. Simplemente evasión.
Pero una vez terminadas, tenían una pinta de pendientes que no podían con ella! Así que yo, la que lleva meses sin usar pendientes gracias a la insistencia de Lía, me hice dos pares de pendientes mariposa
No, no tengo foto con ellos puestos ¿os hacéis media idea de lo difícil que es hacerse una autofoto de los pendientes puestos y que se vean? Tenéis que probarlo, y comprenderéis que no tenga esa foto!! Ahora sólo me queda esperar a que Lía deje de tirar de todo lo que sobresale para poder usarlos a gusto... ¡tarde o temprano ha de llegar el día! Mientras tanto, un RUMS con aires primaverales... entre la nieve, que por fin vino a vernos ¡yo siempre llevando la contraria!
Pero una vez terminadas, tenían una pinta de pendientes que no podían con ella! Así que yo, la que lleva meses sin usar pendientes gracias a la insistencia de Lía, me hice dos pares de pendientes mariposa
No, no tengo foto con ellos puestos ¿os hacéis media idea de lo difícil que es hacerse una autofoto de los pendientes puestos y que se vean? Tenéis que probarlo, y comprenderéis que no tenga esa foto!! Ahora sólo me queda esperar a que Lía deje de tirar de todo lo que sobresale para poder usarlos a gusto... ¡tarde o temprano ha de llegar el día! Mientras tanto, un RUMS con aires primaverales... entre la nieve, que por fin vino a vernos ¡yo siempre llevando la contraria!
4/2/15
Red portabalón
Esto fue algo que decidí hacer un día, harta de la bolsa de plástico del súper en la que llevaban el balón a la plaza cuando iban en bici. Es que si van andando es muy fácil llevarlo en la mano, pero yendo en bici la cosa se complica! Y yo no soy nada forofa de cargar con sus cosas, la verdad. Encontré la idea en Tejiendo Perú, y con las mismas me puse a hacerlo
Sujeté el cordón de cierre a la parte inferior, para que puedan colgarlo como mochila y les deje las manos libres y el manillar de la bici también ¡me pone muy nerviosa que lleven cosas colgando del manillar! ¡siempre me parece que va a hacerles tropezar!
Ni una foto con balón dentro... es que el balón lo dejamos en un cuarto en el portal, y no suelo pasarme por allí con cámara!
Tuve que hacer varias redes de estas en serie (cuando te lo piden bien pedido, pues cedes!) y por eso ahora estoy posponiendo el hacer para casa otra, un pelín mayor para que quepan dos balones cómodamente (en esta caben, pero el segundo queda asomando un poco) y de algún material plástico que no se empape si se moja, porque esta la hice con lo primero que encontré por casa y no me acaba de convencer. Todo se andará...
Sujeté el cordón de cierre a la parte inferior, para que puedan colgarlo como mochila y les deje las manos libres y el manillar de la bici también ¡me pone muy nerviosa que lleven cosas colgando del manillar! ¡siempre me parece que va a hacerles tropezar!
Ni una foto con balón dentro... es que el balón lo dejamos en un cuarto en el portal, y no suelo pasarme por allí con cámara!
Tuve que hacer varias redes de estas en serie (cuando te lo piden bien pedido, pues cedes!) y por eso ahora estoy posponiendo el hacer para casa otra, un pelín mayor para que quepan dos balones cómodamente (en esta caben, pero el segundo queda asomando un poco) y de algún material plástico que no se empape si se moja, porque esta la hice con lo primero que encontré por casa y no me acaba de convencer. Todo se andará...
13/1/15
Las obras de la abuela
¿Os conté alguna vez que mi mami teje de maravilla? Una cosa es decirlo y que me tengáis que creer, y otra es ver las cosas que hace... así que voy a enseñaros unas cuantas. Ya visteis aquí las mantitas que tejió para cada uno de mis bebés, aquí la chaqueta verde de este verano, y hoy traigo algunas prendas que le hizo a Lía recientemente:
¡Siempre me fascinan los detalles! ¡¡y los botones!!
Bueno, pero... casi mejor los vemos con relleno, no?
No tenemos foto con todos los modelos... ¡no damos a basto a hacer fotos! jajaja bueno, poco a poco...
Y... ohhhh con lo que nos gusta este mono... y ni una foto decente! bueno, os lo enseño igual, que la foto es una birria (¿nublado? sí! ¿casi oscureciendo? también! ¿foto con el móvil? pues eso...) pero algo se adivina... ¡es que ya no le entra, no podemos hacer fotos mejores!
¡Siempre me fascinan los detalles! ¡¡y los botones!!
Bueno, pero... casi mejor los vemos con relleno, no?
No tenemos foto con todos los modelos... ¡no damos a basto a hacer fotos! jajaja bueno, poco a poco...
Y... ohhhh con lo que nos gusta este mono... y ni una foto decente! bueno, os lo enseño igual, que la foto es una birria (¿nublado? sí! ¿casi oscureciendo? también! ¿foto con el móvil? pues eso...) pero algo se adivina... ¡es que ya no le entra, no podemos hacer fotos mejores!
10/1/15
Pelota estrellada
Fue uno de los regalos de cumple de Lía, y un paso más en mi obsesión de finiquitar restos de lana: una estrella de ganchillo, grandota, para usarla de pelota. Una pelota que no rueda apenas, que tal vez se libre de ser expropiada por los hermanos mayores para ese eterno partido de fútbol que se disputa en el pasillo.
Son doce puntas, dos de cada color. Un montón de puntos a contar y recontar y deshacer porque conté mal... ¡fue entretenido! Le puse dentro dos huevitos de plástico, de los huevos de chocolate, uno con bolitas pequeñas y otro con bolas de madera medianas, para que haga ruido. Y le gustó, que es lo que cuenta. Nos perseguía con ella para ofrecérnosla y luego pedir que se la pasásemos ¡lo entendió a la primera!
Son doce puntas, dos de cada color. Un montón de puntos a contar y recontar y deshacer porque conté mal... ¡fue entretenido! Le puse dentro dos huevitos de plástico, de los huevos de chocolate, uno con bolitas pequeñas y otro con bolas de madera medianas, para que haga ruido. Y le gustó, que es lo que cuenta. Nos perseguía con ella para ofrecérnosla y luego pedir que se la pasásemos ¡lo entendió a la primera!
29/12/14
Espiraleando
A la chita callando, así en mis ratos muertos, sigo en mi empeño de deshacerme de tanto ovillo de lana a medias, colores sueltos y grosores desparejados. Hace unas semanas, empecé una espiral que estaba llamada a convertirse en chaleco circular para Lía. Una tira verde, un verde oscuro que no me hacía tilín pero del que tenía tres madejas enteras, y otra tira de colores varios en la gama del rosa-lila-morado y similares. Al tuntún, acabar una hebra y empezar otra, la que fuera. Algunas lanas iban en hebra sencilla, otras doble, o incluso triple o cuádruple, lo que hiciera falta para tejer con el ganchillo de 5 mm
Y sí, al final salió el chaleco. Que me da por pensar que el día que ya no le valga se le cosen las aberturas y se reconvierte en cojín... Mientras tanto, para abrocharlo un botón bien chulo (gracias Mónica!!)
Y seguía sobrando lana, así que otra espiral y boina a juego ¡que no se diga!
Y aún queda algo de lana de varios tonos de rosa-violeta-morado, y un bastante de verde, y ya no sabe una si seguir conjuntando prendas o cambiar el chip!!
La intención es que le sirva allá en primavera, cuando un chaleco de lana sea abrigo suficiente para andar por el mundo, y a juzgar por cómo le queda hoy por hoy encima del pijama... creo que vamos bien!
Y sí, al final salió el chaleco. Que me da por pensar que el día que ya no le valga se le cosen las aberturas y se reconvierte en cojín... Mientras tanto, para abrocharlo un botón bien chulo (gracias Mónica!!)
Y seguía sobrando lana, así que otra espiral y boina a juego ¡que no se diga!
Y aún queda algo de lana de varios tonos de rosa-violeta-morado, y un bastante de verde, y ya no sabe una si seguir conjuntando prendas o cambiar el chip!!
La intención es que le sirva allá en primavera, cuando un chaleco de lana sea abrigo suficiente para andar por el mundo, y a juzgar por cómo le queda hoy por hoy encima del pijama... creo que vamos bien!
5/12/14
¡¡Más ovillos fuera!!
En mi afán por finiquitar los restos de lana de procedencias varias, me encontré con una abundancia fuera de serie de hebras azules: azul celeste, azulón, azul marino, azul grisáceo, lana finísima, lana gruesa, lana peluda... ¡una barbaridad! Una birria de cantidad de cada uno, eso sí. ¿Qué se puede hacer con cientos de hebras azules, diferentes y escasas? Obviamente, mezclarlas. Al tuntún, si puede ser. Y juntar varias para poder usar un ganchillo algo gordo, que si no nos eternizamos!
Una boina para la peque, quedó muy tupida así que va a abrigar a base de bien! Llevaba con antojo de una boina de ganchillo así desde que vi la que hizo una amiga... Y no soy muy fan del color azul, pero este batiburrillo de tonos me gusta!
Cada vez quedan menos ovillos en mi poder... ¡pero aún tengo que discurrir qué hacer con unos cuantos! Y presiento que me quedarán para el final los colores más difíciles de mezclar, claro... va a ser un reto personal!
Una boina para la peque, quedó muy tupida así que va a abrigar a base de bien! Llevaba con antojo de una boina de ganchillo así desde que vi la que hizo una amiga... Y no soy muy fan del color azul, pero este batiburrillo de tonos me gusta!
Cada vez quedan menos ovillos en mi poder... ¡pero aún tengo que discurrir qué hacer con unos cuantos! Y presiento que me quedarán para el final los colores más difíciles de mezclar, claro... va a ser un reto personal!
26/11/14
¡Ovillos fuera!
El otro día os conté mi firme determinación de ir acabando con los restos de lana que tenía guardados Lía tenía tirados por todo el salón. Para empezar tenía que conseguir combinarlos de alguna manera, porque de prácticamente ninguno tenía lo suficiente para hacer nada... Sortear el principal escollo, que en mi opinión eran los diferentes grosores, fue fácil: cogí los hilos de tres en tres, y unas agujas de 7mm ¡que así además se tarda menos! Y empecé a tejer como si supiera lo que hacía...
Y poco a poco fue creciendo un rectángulo, al que siguió otro igual, y luego otro mayor, y luego se cerraron con una costura cada uno, y...
Bueno, pues unos calentadores para la enana con su gorro a juego ¡no está mal! Primera tanda de lana ventilada (ejjjjjjem, queda una pequeña muestra de cada color, pero algo haremos). Ya iremos haciendo algo con el resto ¡palabra!
Y poco a poco fue creciendo un rectángulo, al que siguió otro igual, y luego otro mayor, y luego se cerraron con una costura cada uno, y...
Bueno, pues unos calentadores para la enana con su gorro a juego ¡no está mal! Primera tanda de lana ventilada (ejjjjjjem, queda una pequeña muestra de cada color, pero algo haremos). Ya iremos haciendo algo con el resto ¡palabra!
22/11/14
Locura de ovillos
Desde que la peque empezó a gatear (hace como dos mil años) y a ponerse de pie apoyada en los muebles (hace como mil quinientos), en esta casa no hay casi nada que esté a salvo de sus manitas. Y un día encontró mis escondrijos para los ovillos de lana...
¡¡qué locura!! Era igual que un gatito juguetón, feliz y acelerada detrás de aquellas pelotas de colores que rodaban y rodaban dejando un rastro laaaaaaaaaaaaaaargo... ¡¡me iba a volver loca!! ¡¡recogía los ovillos de lana tres veces al día!! Y lo que es peor: tiene la costumbre de echarse por encima de la cabeza y hacia la espalda todo lo que pilla que le parece ropa: telas, papeles, bolsas... hilos... así que solía aparecer el salón lleno de hilos de colores, y el pescuezo de Lía con tres o cuatro enroscados alrededor. Un peligro, esto ya era cosa seria!
Había que hacer algo urgentemente, que no anda una sobrada de cordura para andar perdiéndola... Así que una tarde volqué todas mis bolsas, cajas, cestas y neceseres con restos de lana e hilo encima de la mesa, y mirándolo todo junto decidí que iba a librarme de TODO. ¿Tirarlo? ¿¿pero por quién me tomáis?? ¡si ya me cuesta trabajo tirar los embalajes de las cosas, cómo voy a tirar "las cosas" en sí?! No, lo que hice fue tomar la decisión inamovible de gastar todo aquello lo antes posible, sin pararme a pensar demasiado.
¿Problema? pues que aquello era como un mercadillo, tenía lana gruesa, fina, intermedia, colores vivos, colores apagados, lana que cambia de color, infinitos tonos de azul... ¡un lío! Pero por suerte en esta vida no hay problema que no tenga solución... y si no la tiene es que no es un problema, es que lo estamos enfocando mal! Dentro de poco, espero que muy poco, empezaré a enseñar los frutos de toda esa maraña de lanas...
¡¡qué locura!! Era igual que un gatito juguetón, feliz y acelerada detrás de aquellas pelotas de colores que rodaban y rodaban dejando un rastro laaaaaaaaaaaaaaargo... ¡¡me iba a volver loca!! ¡¡recogía los ovillos de lana tres veces al día!! Y lo que es peor: tiene la costumbre de echarse por encima de la cabeza y hacia la espalda todo lo que pilla que le parece ropa: telas, papeles, bolsas... hilos... así que solía aparecer el salón lleno de hilos de colores, y el pescuezo de Lía con tres o cuatro enroscados alrededor. Un peligro, esto ya era cosa seria!
Había que hacer algo urgentemente, que no anda una sobrada de cordura para andar perdiéndola... Así que una tarde volqué todas mis bolsas, cajas, cestas y neceseres con restos de lana e hilo encima de la mesa, y mirándolo todo junto decidí que iba a librarme de TODO. ¿Tirarlo? ¿¿pero por quién me tomáis?? ¡si ya me cuesta trabajo tirar los embalajes de las cosas, cómo voy a tirar "las cosas" en sí?! No, lo que hice fue tomar la decisión inamovible de gastar todo aquello lo antes posible, sin pararme a pensar demasiado.
¿Problema? pues que aquello era como un mercadillo, tenía lana gruesa, fina, intermedia, colores vivos, colores apagados, lana que cambia de color, infinitos tonos de azul... ¡un lío! Pero por suerte en esta vida no hay problema que no tenga solución... y si no la tiene es que no es un problema, es que lo estamos enfocando mal! Dentro de poco, espero que muy poco, empezaré a enseñar los frutos de toda esa maraña de lanas...
22/7/14
Otra alfombra de trapillo
Nos hacía falta, porque tener sólo una nunca es suficiente si la usas: difícil encontrar el momento de echarla a lavar! La empecé, y avanzó despacio porque con el buen tiempo en esta casa todo avanza despacio ¡y gracias que avanza algo! Pero ahora que está terminada hay una pequeñaja encantada de tener un sitio nuevo desde el que investigar...
Supongo que sí, que podría estar simplemente en el suelo, pero esto ofrece algunas ventajas:
* el suelo casi siempre está frío, y últimamente Lía casi siempre tiene las piernas al aire. No estamos seguros de que le moleste, pero da repelús tocarla y que parezca un iceberg
* cuando hay que tener a mano algún cachivache para entretenerla. siempre sabemos dónde hay unos cuantos: encima de la alfombra. Tiras de la alfombra para arrastrarla allá donde haga falta, y listo
(* ventaja extra: al arrastrar la alfombra hace un efecto mopa que nunca viene mal. Aunque luego hay que quitarle las pelusas a la alfombra. Ventaja dudosa, vaya)
* si pierde el equilibrio y cae de lado o hacia atrás (pasa pocas veces... pero pasa) el "clonc" suena bastante amortiguado, lo que nos hace sospechar que el coscorrón es menor. De hecho no suele ni llorar, a menos que haya quedado en una postura incómoda de la que no sepa salir
* el colorido de la alfombra hace a la enana más visible. Qué chorrada, no? como si no se la viese por sí sola... ¡ya, ya, eso lo decís porque no tenéis en casa dos hermanos mayores en permanente estado de carrera loca! ¡¡nunca se ve lo bastante bien a un bebé en el suelo!! ¡de verdad!
Supongo que sí, que podría estar simplemente en el suelo, pero esto ofrece algunas ventajas:
* el suelo casi siempre está frío, y últimamente Lía casi siempre tiene las piernas al aire. No estamos seguros de que le moleste, pero da repelús tocarla y que parezca un iceberg
* cuando hay que tener a mano algún cachivache para entretenerla. siempre sabemos dónde hay unos cuantos: encima de la alfombra. Tiras de la alfombra para arrastrarla allá donde haga falta, y listo
(* ventaja extra: al arrastrar la alfombra hace un efecto mopa que nunca viene mal. Aunque luego hay que quitarle las pelusas a la alfombra. Ventaja dudosa, vaya)
* si pierde el equilibrio y cae de lado o hacia atrás (pasa pocas veces... pero pasa) el "clonc" suena bastante amortiguado, lo que nos hace sospechar que el coscorrón es menor. De hecho no suele ni llorar, a menos que haya quedado en una postura incómoda de la que no sepa salir
* el colorido de la alfombra hace a la enana más visible. Qué chorrada, no? como si no se la viese por sí sola... ¡ya, ya, eso lo decís porque no tenéis en casa dos hermanos mayores en permanente estado de carrera loca! ¡¡nunca se ve lo bastante bien a un bebé en el suelo!! ¡de verdad!
¿qué? ¿¿¿que estáis hablando de mí??? |
21/5/14
Regalo para el patrón viajero
Cuando recibí el patrón viajero tenía que pensar en alguna cosa para enviar a la siguiente de la lista, así que antes de nada me puse en contacto con ella para saber por lo menos quién era. Y resultó que era cris, una mami de dos peques: uno de dos años y una bebé. Lo primero que se me ocurrió para su bebé, que tiene casi casi la edad de Lía, fue precisamente algo que pensaba hacer para casa y no terminaba de ponerme. Os presento a Caillou jejeje
¡la pañoleta con visera! Me encantan las pañoletas, de tooooda la vida, y desde luego para chiquitines me gustan infinitamente más que las viseras, tan ásperas, tan gordas, tan tiesas... Este año estaba yo empeñada en ponerle visera a las pañoletas y resolver el asunto sol para los peques de casa, pero aún no me había puesto a ello. Y mira tú por dónde, el patrón viajero fue el empujoncito que necesitaba! Hice esta y al poco ya tenía hecha la de Lía
Para el peque tenía varias ideas, pero todas ellas me iban a llevar algo de tiempo y no quería retrasar el viaje del patrón, así que decidí enviarle un retal de una de esas telas que con niños pequeños es casi garantía de éxito, y que entre mami e hijo se entiendan para ver qué hacen con ella. Y para mami... ¡ay, las mamis, qué facilidad tenemos para desaparecer en medio de los hijos! Pues le envié un par de apliques de ganchillo para que ponga donde quiera.
Espero que les guste, y sobre todo que el viaje del patrón siga a buen ritmo para poder ver este verano una explosión de vestidos Hana. El mío ya está tomando forma... ¡aunque de momento sólo en mi cabeza!
¡la pañoleta con visera! Me encantan las pañoletas, de tooooda la vida, y desde luego para chiquitines me gustan infinitamente más que las viseras, tan ásperas, tan gordas, tan tiesas... Este año estaba yo empeñada en ponerle visera a las pañoletas y resolver el asunto sol para los peques de casa, pero aún no me había puesto a ello. Y mira tú por dónde, el patrón viajero fue el empujoncito que necesitaba! Hice esta y al poco ya tenía hecha la de Lía
Para el peque tenía varias ideas, pero todas ellas me iban a llevar algo de tiempo y no quería retrasar el viaje del patrón, así que decidí enviarle un retal de una de esas telas que con niños pequeños es casi garantía de éxito, y que entre mami e hijo se entiendan para ver qué hacen con ella. Y para mami... ¡ay, las mamis, qué facilidad tenemos para desaparecer en medio de los hijos! Pues le envié un par de apliques de ganchillo para que ponga donde quiera.
Espero que les guste, y sobre todo que el viaje del patrón siga a buen ritmo para poder ver este verano una explosión de vestidos Hana. El mío ya está tomando forma... ¡aunque de momento sólo en mi cabeza!
12/5/14
Tejadinas
Tejadinas, que vienen a ser pijadinas tejidas. Porque lo digo yo, vaya, que pa eso las hice!
El ganchillo es mi mejor compañero en las tardes de plaza: ocupa poco, entretiene mucho, y no se siente una tan autista como con un libro cuando aparecen más madres con las que hablar. Cuando no tengo un proyecto "serio" empezado (proyecto serio viene a ser esto, esto, esto, esto, esto... ya me entendéis) me dedico a acabar restos de lana con tejadinas, que al final siempre acaban sirviendo de algo. A veces una pelota, o dos, o tres, estrellas, bolas, ratones... y últimamente apliques planos, que siempre me gusta tener unos cuantos disponibles para el momento en que una prenda me está quedando sosa!
Busqué inspiración en la red y encontré un patrón fácil fácil para estos corazones aquí
Me encantan, no sé si sabré parar de hacerlos!!
Luego busqué mariposas, que sabía hacer un tipo pero no me gustaban demasiado (esas que es un aplique octogonal y se dobla a la mitad). Encontré estas, peeeeeero no entendía ni patata del tutorial ¡qué mal se traducen las abreviaturas de ganchillo del inglés! así que me quedé con la idea y las hice a mi aire. Bien fáciles, la verdad
Y luego pensé en animalillos, y encontré un montón de ideas que me daba pereza ir mirando poco a poco, así que las dibujé a lo bruto convencida de poder inventarme los patrones. Alguno sí que lo conseguí, sí!
Pues recién hechas casi, calentinas todavía, unas cuantas de estas tejadinas marcharon en su sobre rumbo a otras casas... porque hay amigas que siempre merecen un detalle, aunque sea una pijadina, no?
El ganchillo es mi mejor compañero en las tardes de plaza: ocupa poco, entretiene mucho, y no se siente una tan autista como con un libro cuando aparecen más madres con las que hablar. Cuando no tengo un proyecto "serio" empezado (proyecto serio viene a ser esto, esto, esto, esto, esto... ya me entendéis) me dedico a acabar restos de lana con tejadinas, que al final siempre acaban sirviendo de algo. A veces una pelota, o dos, o tres, estrellas, bolas, ratones... y últimamente apliques planos, que siempre me gusta tener unos cuantos disponibles para el momento en que una prenda me está quedando sosa!
Busqué inspiración en la red y encontré un patrón fácil fácil para estos corazones aquí
Me encantan, no sé si sabré parar de hacerlos!!
Luego busqué mariposas, que sabía hacer un tipo pero no me gustaban demasiado (esas que es un aplique octogonal y se dobla a la mitad). Encontré estas, peeeeeero no entendía ni patata del tutorial ¡qué mal se traducen las abreviaturas de ganchillo del inglés! así que me quedé con la idea y las hice a mi aire. Bien fáciles, la verdad
Y luego pensé en animalillos, y encontré un montón de ideas que me daba pereza ir mirando poco a poco, así que las dibujé a lo bruto convencida de poder inventarme los patrones. Alguno sí que lo conseguí, sí!
Pues recién hechas casi, calentinas todavía, unas cuantas de estas tejadinas marcharon en su sobre rumbo a otras casas... porque hay amigas que siempre merecen un detalle, aunque sea una pijadina, no?
1/5/14
Rescatado del olvido
Anda, que ya me vale... a ver, ¿alguien por aquí se acordaba de esto?
Bah, qué tontería, quién se va a acordar si no me acordaba ni yo!! Eh, que si hay alguien que sí que se acordaba me lo podría haber dicho, la verdad!
El caso es que el año pasado andaba yo metida en un proyecto de ganchillo que justo cuando faltaba sólo el último empujón quedó colgado. ¿El motivo? pues que rompí el ganchillo en una maniobra un tanto heterodoxa: utilizándolo como palanca para volver al sitio la cadena de una bici. Ooooops! Una barbaridad, lo sé, lo sé... pero cuando hay una urgencia se usa lo que se tiene a mano, no? No era la primera vez que lo usaba para esa burrada, lo confieso. Pero esa vez cascó. Y al quedarme sin ganchillo aparqué la labor. Y cuando me acordé de comprar otro ganchillo sustituto, no me acordé en absoluto del trapo que andaba a medias ¡¡serían las hormonas, no me juzguéis muy severamente!! De repente hace unos días, revisando hilos y lanas, me llevé la sorpresa del año ¿¿¿y estooooooo??? Pues nada, oye, seguimos hasta terminarlo...
Que ya puesta a seguirlo, me dio por cometer un error enorme: conté los puntos que había en la primera vuelta, y los que había en la última. Estoooooooo bueno, sólo habían desaparecido por el camino ¡¡¡seis!!! En fin, sin comentarios... es lo que tiene tejer en la plaza, con un ojo en la bici de Chus y medio cerebro a la cháchara con otras madres. Me dio por recuperar los puntos perdidos en las vueltas que faltaban (¿deshacer? ¿eso qué significa? ¡ni de coña, que esta obra ya llevaba a medias un año, no quería dejarla otro!), así que al final los dos extremos empatan. Lo del medio va a su aire, que en la vida es muy importante vivir cada uno a su manera.
El resultado es un chaleco para esas tarde-noches de verano en las que entra fresquete por la riñonada, y ahora que lo veo terminado, con sus puntos perdidos y recuperados y todo, ¡¡me encanta!! Claro, en tantos meses se me habían olvidado esos colores chulísimos y ese tacto impresionante que tiene el hilo... ¡es para estar acariciándolo todo el rato! Ah, sí, el hilo, que bien merece una presentación: es My Silk de Schoppel Wolle, mezcla de algodón y seda, lo compré en www.tejeme.com, aunque ahora sólo les quedan restos de stock.
Tengo varios palos para el pelo que no puedo usar hasta que me crezca más, así que les voy dando uso como se me ocurre:
Y así, casi un año más tarde, por fin pude estrenar mi trapito y enseñároslo en esta edición de RUMS... ¡¡ahora que venga el sol, y a disfrutarlo!!
Bah, qué tontería, quién se va a acordar si no me acordaba ni yo!! Eh, que si hay alguien que sí que se acordaba me lo podría haber dicho, la verdad!
El caso es que el año pasado andaba yo metida en un proyecto de ganchillo que justo cuando faltaba sólo el último empujón quedó colgado. ¿El motivo? pues que rompí el ganchillo en una maniobra un tanto heterodoxa: utilizándolo como palanca para volver al sitio la cadena de una bici. Ooooops! Una barbaridad, lo sé, lo sé... pero cuando hay una urgencia se usa lo que se tiene a mano, no? No era la primera vez que lo usaba para esa burrada, lo confieso. Pero esa vez cascó. Y al quedarme sin ganchillo aparqué la labor. Y cuando me acordé de comprar otro ganchillo sustituto, no me acordé en absoluto del trapo que andaba a medias ¡¡serían las hormonas, no me juzguéis muy severamente!! De repente hace unos días, revisando hilos y lanas, me llevé la sorpresa del año ¿¿¿y estooooooo??? Pues nada, oye, seguimos hasta terminarlo...
Que ya puesta a seguirlo, me dio por cometer un error enorme: conté los puntos que había en la primera vuelta, y los que había en la última. Estoooooooo bueno, sólo habían desaparecido por el camino ¡¡¡seis!!! En fin, sin comentarios... es lo que tiene tejer en la plaza, con un ojo en la bici de Chus y medio cerebro a la cháchara con otras madres. Me dio por recuperar los puntos perdidos en las vueltas que faltaban (¿deshacer? ¿eso qué significa? ¡ni de coña, que esta obra ya llevaba a medias un año, no quería dejarla otro!), así que al final los dos extremos empatan. Lo del medio va a su aire, que en la vida es muy importante vivir cada uno a su manera.
El resultado es un chaleco para esas tarde-noches de verano en las que entra fresquete por la riñonada, y ahora que lo veo terminado, con sus puntos perdidos y recuperados y todo, ¡¡me encanta!! Claro, en tantos meses se me habían olvidado esos colores chulísimos y ese tacto impresionante que tiene el hilo... ¡es para estar acariciándolo todo el rato! Ah, sí, el hilo, que bien merece una presentación: es My Silk de Schoppel Wolle, mezcla de algodón y seda, lo compré en www.tejeme.com, aunque ahora sólo les quedan restos de stock.
Tengo varios palos para el pelo que no puedo usar hasta que me crezca más, así que les voy dando uso como se me ocurre:
Y así, casi un año más tarde, por fin pude estrenar mi trapito y enseñároslo en esta edición de RUMS... ¡¡ahora que venga el sol, y a disfrutarlo!!
24/4/14
Me viene al pelo
Resulta que me creció el pelo. Qué cosa tan rara, no? Pues me pasa de vez en cuando, que tenía yo el pelo corto y cuando me quiero ir a fijar... ¡zas! ¡largo!
El año pasado, a finales de junio, tuve un momento de dudosa inspiración nocturna y corté de cuajo las dos coletas que llevaba en el pelo. Ris, ras. Con las tijeras de la cocina. A lo bruto. Tan a lo bruto que sólo cuando ya era tarde me di cuenta de que los restos de la masacre no me alcanzaban para una coleta... ¡¡y llegaba el verano!! ¡¡y el calor!! Yo soy de las que no soportan pelo suelto por el cuello cuando hace calor... pues qué bien, no? Pasé todo el verano entero con dos moñitos, que era para lo que llegaba. Y ahora resulta que está más largo de lo que pensaba, lo suficiente para ir usando cositas del pelo de las que andaban escondidas por los cajones... y claro, de repente me asaltó la necesidad imperiosa de hacerme una pijadina nueva!!
Empecé con una espiral de ganchillo, con restos de lana lo bastante escasos como para no servir de mucho... pero ya ves!
Después le puse fieltro por la parte trasera
Y para sujetarlo a la cabeza utilicé un palo. Pero un palo chulo, eh!
Me lo regaló mi hermana hace un par de años, talladín por ella misma, que es lo que más me gusta. La largura del pelo aún no da para usarlo solo, así que por ahora será parte del ¿prendedor? ¿pasador? ¿chisme? (cachivache no, que cachivache sólo hay uno). O como una amiga propuso bautizarlo, PALPE... ¡pal pelo! Este es mi nuevo palpe:
Y así queda puesto ¡qué difícil la autofoto de espaldas!!
Este es mi RUMS más diminuto por el momento... ¡pero me encanta! Ya sólo queda saber si será mi nuevo palpe favorito... aunque reconozco que le va a costar desbancar a mi bruja!
No se me olvida que hoy es el día de ponerse la ropa del revés, no... Lo que pasa es que hoy LLEVO la ropa del revés y me hago la foto, y ya si eso os la enseño mañana -si hay suerte- o... lo antes posible si la suerte no acompaña!
El año pasado, a finales de junio, tuve un momento de dudosa inspiración nocturna y corté de cuajo las dos coletas que llevaba en el pelo. Ris, ras. Con las tijeras de la cocina. A lo bruto. Tan a lo bruto que sólo cuando ya era tarde me di cuenta de que los restos de la masacre no me alcanzaban para una coleta... ¡¡y llegaba el verano!! ¡¡y el calor!! Yo soy de las que no soportan pelo suelto por el cuello cuando hace calor... pues qué bien, no? Pasé todo el verano entero con dos moñitos, que era para lo que llegaba. Y ahora resulta que está más largo de lo que pensaba, lo suficiente para ir usando cositas del pelo de las que andaban escondidas por los cajones... y claro, de repente me asaltó la necesidad imperiosa de hacerme una pijadina nueva!!
Empecé con una espiral de ganchillo, con restos de lana lo bastante escasos como para no servir de mucho... pero ya ves!
Después le puse fieltro por la parte trasera
Y para sujetarlo a la cabeza utilicé un palo. Pero un palo chulo, eh!
Me lo regaló mi hermana hace un par de años, talladín por ella misma, que es lo que más me gusta. La largura del pelo aún no da para usarlo solo, así que por ahora será parte del ¿prendedor? ¿pasador? ¿chisme? (cachivache no, que cachivache sólo hay uno). O como una amiga propuso bautizarlo, PALPE... ¡pal pelo! Este es mi nuevo palpe:
Y así queda puesto ¡qué difícil la autofoto de espaldas!!
Este es mi RUMS más diminuto por el momento... ¡pero me encanta! Ya sólo queda saber si será mi nuevo palpe favorito... aunque reconozco que le va a costar desbancar a mi bruja!
No se me olvida que hoy es el día de ponerse la ropa del revés, no... Lo que pasa es que hoy LLEVO la ropa del revés y me hago la foto, y ya si eso os la enseño mañana -si hay suerte- o... lo antes posible si la suerte no acompaña!
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